Mi corazón está con todos ustedes. No hay palabras que sirvan de mucho en este momento, pero quería decir presente en mi nombre y en el de mi familia y acompañar aunque sea de esta humilde manera a toda la gente damnificada no sólo en lo material, sino también en lo espiritual por este terrible terremoto.
Nuestras oraciones para todos ellos.
Saludos, Euge.
lunes, 1 de marzo de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario